domingo, 8 de abril de 2012

Un ‘puente’ para cobros abusivos


Un ‘puente’ para cobros abusivos 
A 45 kilómetros de Santa Cruz de la Sierra se levanta una imponente obra de la ingeniería moderna: el puente más largo construido hasta ahora en Bolivia y que con sus 1.400 metros de largo, atraviesa todo lo ancho del Río Grande, a la altura de Puerto Paila, posibilitando, además, la integración comercial regional con Beni, la Chiquitanía, la zona fronteriza con Brasil y con este gigante vecino. No es poca cosa cuando antes, para cruzar el río, se utilizaba una vieja estructura metálica que además de vehículos motorizados sobre un desgastado y crujiente entablonado, permitía -y todavía resiste-, el paso del ferrocarril que interrumpía con largueza la circulación vehicular de uno y otro lado.
ARGUMENTOS:
Este párrafo habla sobre la nueva obra de la ingeniería moderna que abarca la construcción del puente más largo de Bolivia. Este puente se encuentra hallado a 45 kilómetros de Santa Cruz de la Sierra,  el cual con sus 1.400 metros de largo atraviesa todo lo ancho del río Grande lo que permite a su vez la integración comercial con la Chiquitanía del departamento de Beni y con la frontera del vecino país, Brasil. Este puente viene siendo una consuelo para la zona Puerto Paila, ya que antes, cuando aún no existía el puente los vehículos tenían que transcurrir por el paso del ferrocarril lo que producía una muy pausada circulación vehicular.

Para mayores referencias, la empresa surcoreana Sambu se hizo cargo de los trabajos del nuevo puente a partir de noviembre de 2005 y su inauguración tuvo lugar en enero de 2009, merced a la probada eficiencia y puntualidad de los constructores asiáticos. El Gobierno central, sin poner un centavo, se adueñó del ‘show’ de la entrega de la obra financiada por el gobierno coreano con $us 23 millones, la Corporación Andina de Fomento (CAF) con $us. 1,4 millones y la Gobernación de Santa Cruz con $us. 6 millones.
ARGUMENTOS:
La construcción del nuevo puente fue realizada por la empresa surcoreana Sambu, con una inversión de $us 23 millones a partir de noviembre de 2005, y tomando y  afirmando la puntualidad y eficiencia de los constructores asiáticos esta fue inaugurada en enero de 2009. Sin embargo, el Gobierno central, sin haber invertido ni un solo centavo en dicha construcción se adueñó de  la obra financiada por el gobierno coreano.  
En el acto inaugural, el vicepresidente Álvaro García Linera aseguró que con el flamante puente ya habilitado, desaparecerían las improvisadas casetas donde sin escrúpulo algunos policías, ‘funcionarios’ municipales y ‘dirigentes’ vecinales vienen realizando cobros irregulares a título de ‘colaboración voluntaria’ o para financiar supuestas ‘obras’ en la zona. Pero como nadie le llevó el apunte al anuncio del ‘vice’, las casetas y los ‘cobradores’ permanecen inamovibles en su sitio…
ARGUMENTOS:
En el acto inaugural de esta nueva obra, el vicepresidente Álvaro García Linera, afirmó que con la construcción del nuevo puente desaparecerían las casetas inventadas por policías, funcionarios y dirigentes municipales, quienes utilizando como pretexto la falta  de obras en la zona,  ordenaban donaciones voluntarios para una supuesta construcción de las mismas, sin embargo y hasta la fecha, las casetas y los cobradores aún permanecen inmóviles.

El indebido cobro ocasiona, además, largas colas de vehículos y exasperantes demoras que replican el mismo problema que existía antes de la inauguración del puente. Y es que en uno de los accesos de aquel estratégico cruce sigue formándose un insufrible cuello de botella por nada más que la ‘melea’ que allí, desde tiempos inmemoriales, se practica el año redondo. Con justificada razón, entre los más perjudicados se consideran los transportistas de granos y de otros productos cuya entrega, especialmente en tiempos de cosecha, no puede ser retrasada.
ARGUMENTOS:
El excesivo y obligado cobro de donaciones voluntarias, fue ocasionando diversos problemas en esta zona, comenzando por las largas colas de vehículos transportistas y terminando con la demora en entregar dichas mercaderías a los demás departamentos. Y es  en estos casos donde se refleja la poca diferencia que existe  antes y después de la inauguración de la nueva obra, ya que con ella o sin ella se siguen percibiendo los mismos problemas de siempre, donde no solo los transportista salen perjudicados, sino que esto a su vez también involucra a todos los habitantes de esta zona.

Por lo antes expuesto resulta inadmisible que, a casi un  lustro de su entrega y conectado a una de las principales y más estratégicas carreteras de la red vial del país, el moderno y costoso puente sobre el Río Grande siga arrastrando el lastre de cobros irregulares que frena en seco la fluidez del incesante tránsito vehicular que se registra por la zona. Que de una buena vez hagan lo que tengan que hacer al respecto las instancias correspondientes y no se lo lleve demasiado lejos la corriente el anuncio público del vicepresidente García Linera. No más casetas improvisadas ni cobros indebidos para atravesar el Río Grande. Ya es tiempo, el del ‘cambio’, de acabar con el ‘puente’ de los abusos y de las corruptelas. 
ARGUMENTOS:
Ante el corto lapso de la entrega de la obra, se hace injusta e inaceptable los cobros irregulares que aún se van registrando en la zona, puesto que con la continua presencia de dichos cobros, los problemas  de tránsito de mercaderías de esta zona seguirán inactivos, lo que con el tiempo ocasionaran nuevos problemas que afectaran, ya no departamentalmente, sino nacionalmente el transporte de cosechas. Respecto a esta situación se espera que el gobierno retire las supuestas casetas inventadas por policías y retire los cobros indebidos que se realizan para atravesar Río Grande.

LENGUAJE:
El lenguaje que se encuentra en este editorial es netamente editorializante porque presenta ciertas limitaciones en su estructura; utiliza adjetivos inducidos; y pretensión de poseer lo verdadero, refiriéndose a que todo su contenido está basado en un análisis y una investigación realizada con anticipación, recopilación de datos verdaderos y concretos. A su vez se debe resaltar los juicios de valor que emplea en su contenido.

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